Cómo empezar una pelea

Cómo empezar una pelea

Las peleas no empiezan de la nada, sino que se intensifican. Necesitas aprender a mantener el control de tus emociones, trazando una línea entre las cosas que puedes dejar pasar y las que vale la pena calentar. Necesitas tener el control de la situación, si te preocupa que se desate una pelea. Aprenda a distinguir entre buenas y malas peleas, y cómo ponerse de pie y defenderse adecuadamente.

Nunca empieces una pelea física, si puedes evitarlo. Nunca se recomienda elegir una pelea física, y la pelea física sólo debe ocurrir si no tiene otra opción. Si tienes que defenderte físicamente de forma absoluta, puedes aprender a hacerlo con fuerza e inteligencia, para acabar con ello lo más rápido posible, pero nunca, bajo ninguna circunstancia, en caso de que te pelees.

Mantente alejado del suelo. Meterse en un al! tercado físico no es MMA. Tu objetivo no es «moler y golpear». Es importante mantener estas peleas tan cortas y seguras como sea posible, relativamente hablando, y usted no quiere permitir que lo derriben, bajo ninguna circunstancia. Si sigues peleando con alguien una vez que ha caído, eso es asalto.

Haz contacto visual. Es importante que te establezcas en cualquier tipo de confrontación, para que la otra persona sepa que eres serio y que no estás bromeando. Evitar el contacto visual hará que los agresores piensen que podrán intimidarla aún más, pero hacer contacto visual muestra confianza y seriedad. Si la gente cree que será capaz de intimidarte

Mantenga una postura defensiva. Si se trata de luchar, defiéndete con la postura correcta. Es importante mantener las rodillas flexionadas y el peso hacia adelante, para mantener el equilibrio y la movilidad. Si te pones de pie plano y estás a la altura de tu oponente, vas a ser derribado.

Ponga la p! elota en el campo de la otra persona. Una buena manera de term! inar una pelea en la etapa de discusión es darle a la otra persona una opción. Si tu amigo no deja de burlarse de ti por algo, o si tu pareja sigue pinchándote con el mismo tic molesto, sé claro y dales una opción. Diga: «Necesito que sepas que si no dejas de hacer eso, esto se acabó. Tienes esta oportunidad. Si lo haces una vez más, me voy».

Deja de hablar. La mayoría de los argumentos llegan a un punto en el que no tiene sentido seguir diciendo las mismas cosas una y otra vez. Si ha dicho lo que tenía que decir, déjelo en paz y considere hablar de ello cuando ambas partes tengan la oportunidad de calmarse. Es especialmente importante que se aleje si siente que se está enojando hasta el punto de rebosar. Saber cuándo alejarse y dejar la discusión.

Usa tus palabras primero. Lo primero que debe hacer en cualquier situación es hablar. «Comenzar una pelea» no debería ser tu objetivo. «Resolver un problema» debería serlo. Que eso se convierta o! no en una confrontación física dependerá de la gravedad de la situación, de las personas involucradas y de lo que se diga a continuación. Pero, tiene que empezar por hablar, cualquiera que sea la situación, y quienquiera que esté involucrado.

Vuelva a levantarse, si es necesario. Si le superan en número, o en un ambiente extremadamente hostil, no intente entrar en una pelea por su cuenta. En algunas situaciones, no se puede ganar. En otros, es importante tener testigos presentes, para que nadie pueda acusar a ninguna de las partes de mentir más tarde, si las cosas se ponen feas.

Decide dónde está tu línea y dibújala. Algunas cosas no son dignas de pelea, pero la línea de cada uno es diferente. ¿Tu hermano robó tu juguete? ¿Tu cita olvidó a qué hora se suponía que tenías que encontrarte? ¿El tipo junto a ti en el bar sigue diciendo cosas rudimentarias sobre una mujer? Ciertas cosas son motivo para hablar, pero es mejor dejar pasar ciertas c! osas. ¿Dónde está tu línea? ¿Qué debe hacer alguien para cruzarla! ?

Concéntrate en ti mismo. Utilice las frases «I», si tiene más que decir en su argumento. Es importante mantener las cosas enfocadas en tus propios sentimientos, o la otra persona se sentirá atacada y es probable que las cosas se agraven de una manera desagradable. Usted debe tratar de evitar esto si es posible.

Evite todas las peleas, si es posible. Por lo general, usted puede desactivar una situación con su inteligencia, antes de tener que preocuparse de «ganar» una discusión, o de defenderse en una pelea física. Si puedes mantener la calma y mantener la cabeza fría en una situación de calor, estarás mucho mejor que la otra persona.

Mantenga la calma cuando la gente cruce su línea. Las peleas estúpidas ocurren cuando te dejas llevar por una reacción emocional, lo que generalmente resulta en una reacción exagerada. Cada vez que alguien empiece a apretar tus botones y a cruzar tus líneas, da un paso atrás. Respira hondo. Cálmese, antes! de hacer cualquier otra cosa, para que pueda reaccionar con inteligencia.

Di lo que tengas que decir, con calma. Confronta a la persona que te está molestando tan calmada y concisamente como sea posible, y di lo que necesitas decir. Si alguien lo está molestando, dígale que se detenga, en la menor cantidad de palabras posible. Levántate, haz contacto visual y di: «Necesito que dejes de hacer eso ahora. Ok?»

Evaluar la situación. ¿Quién te está provocando y cuál es su intención? ¿Pueden decir que están causando ofensa? ¿Están tratando de sacarte los nervios de encima? Es importante tratar de averiguar qué está pasando, para que no actúes estúpidamente y causes una discusión que no necesita ser causada.

Muévete hacia los puñetazos. Si te metes en una pelea, tu instinto suele ser retroceder, pero tienes que aprender a resistir este impulso y ponerte a pegar. Si cree que está a punto de recibir un golpe en la cabeza o en la cara, tense! los músculos de la mandíbula y del cuello y manténgase en movimient! o tanto como sea posible. Si te estás moviendo hacia atrás, es más probable que te derriben y que el golpe te golpee en el vértice de su poder, en lugar de justo antes.

Sea el adulto en la habitación. Cuando se enfrentan, muchos agresores, instigadores y matones confían en tácticas juveniles probadas y verdaderas. Se reirán de ti por ser serio. Gritarán. Se burlarán de ti. Intentarán hacer cualquier cosa para que exageres. Es extremadamente importante mantener la calma. Imagina que tienes una burbuja impenetrable a tu alrededor, y espera que digan algo ofensivo.

Aprende a lanzar un puñetazo correctamente. Primero, cierra bien el puño envolviendo el pulgar en la parte inferior de los dedos, como si tuvieras un bicho dentro de la mano que quisieras conservar. Mantenga los codos metidos y piense en sus puñetazos como líneas rectas, no como curvas salvajes. Quieres que tu puño salga directamente de tu cuerpo, que será más poderoso que un hacedor de! heno salvaje.

Termínalo lo más rápido posible. Un puñetazo fuerte en la parte inferior de la mandíbula, o golpear el viento de alguien con un tiro fuerte en el intestino debe terminar la mayoría de las peleas. La mayoría de la gente no quiere pelear. Trate de terminar una pelea lo más rápido posible y siga adelante, antes de que se vuelva demasiado fea.